jueves, 22 de diciembre de 2016

Ahora

Seguiré a mi bola desafiando a quien diga,
Que no puedo levantarme con los pelos alocados.
La pintura de los ojos corrida.
La ropa de la juerga de ayer.
La mala hostia acumulada.
Las ideas en la sangre.
Y el acertijo en la mirada.
Seguiré huyendo hacia adelante.
Escribiendo lo que me sale.
Y decidiendo a quien le sonrío.
Ahora que me siento libre.
¿Quien va a detenerme?
Ahora que no puedo callarme.
¿Quien va a hablarme?
Ahora que ya no escucho.
¿Quien va a darme su opinión?
Ahora que me brillan lo ojos.
¿No piensas mirarme?
Ahora que  quiero escucharte.
¿No vas a juzgarme?
Ahora que quiero mi dosis de vida.
Ahora que por fin soy libre.
¿De verdad me importas?

miércoles, 14 de diciembre de 2016

Testigos

Se me agrieta el alma al oír,
que en vuestros sueños no hay princesas.
Que vuestra dulce piel ha sido marcada.
Que no hay botón que suprima el pasado.
Se me dilatan las heridas al leer,
que ya habéis vetado palabras.
Que en vuestros cuentos no hay héroes,
pero sí un villano.
Que en esas miradas se ha perdido la inocencia.
Se me encogen las entrañas al ver,
que el miedo os destruye.
Que los "malos"  seguirán siendo criminales, 
y vosotras no volveréis a ser niñas.
Que llevaréis la injusticia tatuada, 
y ellos una cara más.
Se me desangra el corazón al pensar,
Que sois más de una y más de dos,
a las que a diario tortura una imagen
Que reposar para vosotras,
ya no es más que un delirio.
Se me desborda el ánima intentando,
no sentirme identificada.
Con ángeles invadidos,
por un monstruo nauseabundo.

sábado, 10 de diciembre de 2016

El miedo

Tenía tanto que decir y sin embargo, no me salieron palabras.
Tenía demasiado dentro y no pude sacar nada.
Me decidí a darle una explicación.
Al silencio.
Al insomnio.
A los ojos inundados.
Y sólo pude perderme en un mar de lágrimas.
Créeme cuando te digo que quiero.
Y también cuando no puedo.
Toda mi vida he huido de lo que me aterraba,
y ahora el miedo me ha plantado cara.
Para impedirme seguir así.
Resulta irónico pero se lo agradezco.
Me ha empujado al mundo.
Me ha puesto los pies en la tierra.
Me ha obligado a asomarme al abismo.
Me ha exigido mirarle sin un ápice de espanto.
El miedo nos paraliza,
Nos debilita.
Nos anula.
Pero otras veces.
Saca nuestro lado más valiente.
Nos hace crecernos ante las adversidades.
El miedo puede ser nuestro peor enemigo,
pero igualmente un gran aliado.

domingo, 4 de diciembre de 2016

Un programa que me hizo entender

Un domingo cualquiera, 
un programa me hizo entender. 
Que el silencio ya no tenía sentido. 
Que aún viviendo otra vida, 
el robo de la inocencia sería imperdonable. 
Durante dos días encerrada, 
conseguí mirarme al espejo y derrumbarme. 
No como siempre. 
Fue extraño. 
Había tanta rabia en las lágrimas...
Que hasta hacían daño. 
Podía sentir cómo me ardía la sangre. 
Pero no sabía que hacer. 
Estaba tan asustada y cansada... 
Caía la noche cuando me descubrí allí sola, 
mirando el punto fijo de siempre. 
Con los ojos ardientes de ira,  
y la mano en el pecho... 
Deseé poder arrancarme el corazón. 

domingo, 27 de noviembre de 2016

Tempestad

Una semana lloviendo,
y estoy calada hasta los huesos.
La sopa caliente me abre las carnes,
dejando entrever las heridas.
Las manos congeladas,
ya no sienten.
Al corazón le laten los puntos.
El día está gris,
y los brotes verdes.
La noche oscura,
y el suelo empapado.
Las botas mojadas,
y la chimenea ardiendo.
Los ojos cómplices del aguacero,
y las nubes diluviando sin cesar.
Lleva una semana lloviendo,
y ya no siento nada.



viernes, 18 de noviembre de 2016

Es viernes...

Es viernes y vuelvo a necesitar la música alta.
Está terminando la semana.
Y me pregunto en qué domingo se quedaron mis ganas.
Esas ganas de levantarme cuando suena el despertador.
De arreglarme un pelo indomable.
De vestirme con un color llamativo.
De sentir sin querer.
De amar sin estar segura.
De comer sin hambre.
De existir con razones escasas.
De fingir no saber, sabiendo que se.
Es viernes y recaigo en la necesidad.
De mirar por la ventana durante horas.
De permanecer en silencio.
De meterme en la cama y no pensar en nada.
De ver televisión basura para no sentirme sola.
Es viernes y ando sobrada.
De frío interno.
De dolor de cabeza.
De ojeras.
De ironía en la mirada.
Es viernes y me sobra hasta la ropa.
Pero me falta demasiado hasta que me sobres tu.

sábado, 12 de noviembre de 2016

Huracán

Una vez más perdí el control de mi misma.
Se me volvió a correr el rimel con lágrimas.
Volví a dejarme caer con la esperanza de renacer más fuerte.
Me creí un ave fénix, pero mis cenizas ya no encajaban.
La presión de seguir sin motivos aparentes,era escalofriante.
Aquella tarde caí si fuerzas sobre la cama.
Abracé con energía la almohada y suspiré.
Tenía que parar todo de alguna forma.
Pensé en dar un paseo para aclarar la mente.
Y cuando estuve ante la puerta.............
Di un paso atrás y se me escapó una lágrima.
Lloraba de rabia, quería controlar cada cosa que pasaba en mi vida.
Pero esto estaba en manos del tiempo.
Volví a la habitación y miré por la ventana con recelo.
Mis días eran así, huracanados, a veces demasiado.
Me gustaba la calma, pero en pasado.
Me acostumbré a que parar era señal de peligro.
A veces echaba el freno inesperadamente.
Y ahí era cuando me asaltaban los miedos, las dudas, todo.
En esos instantes de quietud la vida se me hacía eterna.
Por ese motivo me gustaba hacer la cosas repentinamente.
Ya no me apetecía planear cada minuto de mi existencia.
Entendí que para vivir no hacía falta un manual.
Que cada día iba a ser único.
Que por más que diseñara un plan perfecto, el destino haría de las suyas.

sábado, 5 de noviembre de 2016

Golpearon los recuerdos

Me senté en tu sillón y dejé que me golpearan los recuerdos.
Las fotos me llevaron a otra época.
Esa, donde la magia de mirarte a los ojos era tan real como la vida misma.
He vagado por cada rincón buscando un ángel al que abrazar.
Pero he tenido que consolarme con el horrible vacío de sentir que nunca volverás.
Intento no difuminar tu imagen con lágrimas y se me hace imposible 
El silencio de un lugar antes tan vivo me da miedo.
Miedo, a darme cuenta de la ausencia.
Este tiempo atrás, mantuve una luz de esperanza.
Pensé que sólo había sido una pesadilla horrible.
Pensé que al despertar estarías conmigo.
Y al salir de aquel monstruoso sueño te habías ido........
Pero hay algo llamado alma que aún siento tan cerca o más que antes.
Hoy azotó mi piel con fuerza el viento.
Te vi como nunca antes y se me escapó un te quiero de los de siempre.
De repente empezó a llover a cántaros.
Y mientras todos se lamentaban, yo te sonreí...............


domingo, 30 de octubre de 2016

No digas para siempre

No digas para siempre.
Queda fatal.
Es engañarse innecesariamente.
En serio, ya nada es para siempre.
No prometas algo sin sustancia.
Duele, cuando entiendes lo efímero de las cosas.
Las chicas ya no queremos mundos de rosa.
Queremos verdades, aunque resulten dolorosas como puñaladas traperas.
Personalmente,prefiero que me toquen sin guantes.
Que cuando me abracen lo hagan con ganas.
Que cuando me besen me dejen sin aliento.
Que al regañarme sea como una bofetada de verdad.
No digas para siempre, chaval.
Sácate algo de la manga, algo tuyo, algo real....
Las princesas se han quedado en los cuentos.
El color rosa ha pasado a segundo plano.
Hemos pasado de ser animales a "seres humanos".
De izquierda a derecha.
De niños inocentes a adultos redomados.
De ricos a pobres y viceversa.
De decir hoy para siempre a mañana decir hasta siempre.
Entonces dime, ¿De veras crees en lo eterno?


viernes, 21 de octubre de 2016

Lo admito

Vale, lo admito, soy difícil.
Mi humor por la mañana no invita a despertar a mi lado.
Desayunar a las siete me da náuseas.
No respondo de buenas las preguntas matinales.
Pongo música cuando subo al coche porque odio hablar durante el trayecto.
La inseguridad me hace perder miles de oportunidades.
Vivo paralizada por el miedo al menos un 30% del día.
Tengo más claro el futuro que el presente.
Aún duermo rodeada de peluches, pensando que estos me devolverán la inocencia que caracteriza a los niños.
Admito que soy mas de frio que de calor.
Que no entiendo la gama de grises porque vivo tocando extremos.
Que mis canciones dependen del día. No tengo un estilo definido.
Que soy observadora por naturaleza.
Que he entrado en una etapa en la que me sobra la gente que no aporta nada.
Que la soledad me ha hecho más compañía que cualquier ser humano en los últimos meses.
Que lleno libretas de palabras que jamás verán la luz.
Que soy incapaz de escribir acerca de la felicidad.
Que me asusta perderme por completo.
Que tengo la manía de conocer a las personas a través de sus miradas.
Que hay cosas que se vendrán conmigo a la tumba sin que haya sido capaz de contarlas.
Que nunca se cómo empezar y mucho menos cómo terminar.
Admito que tengo mil defectos, pero si son ciertos los horóscopos, jamás traicionaré a quien me abra su vida.

viernes, 14 de octubre de 2016

Septiembre

Era fría, aburrida y lúgubre.
Sin embargo aquel día, fui todo lo contrario ¿Cierto?
¿Por qué?
Dime,¿Por qué lo hiciste?
¿Fue fácil verdad?
Es fácil elegir a alguien a quien le cuesta hasta vivir para experimentar.
¿Verdad o mentira?
Debe de estar siendo muy sencilla la vida con un rostro en tu conciencia.
Es más, me atrevo a decir que estás orgulloso de haberme arrojado al abismo. ¿No?
Dime, ¿Por qué lo hiciste?
Aunque mejor, permíteme no desearte un dolor semejante.
No por falta de ganas, es sólo que no aguantarías ni un sólo día:
La angustia de mirarte al espejo y sufrir náuseas.
El rozar tu propio cuerpo y recordar un día concreto.
El cerrar los ojos y ver la misma escena repetirse una y otra vez.
El apagar la luz y tener que volver a encenderla porque hay una mirada que aparece en la oscuridad.
El salir a la calle después de haberlo planeado durante horas,y volver con la sensación de que has perdido el aliento en el camino.
Podría seguir pero el miedo me invade.
No confundas, no estás en estas letras por ser importante, estás aquí por haber arruinado todo lo que hasta ese día creí que era ser niña.




viernes, 7 de octubre de 2016

Quizá despierte algún día...

Quiero ser el capuchino que roce tus labios cada viernes por la tarde.
Ojalá pudiera parar el tiempo en ese instante.
Reabriría debates mentales que ya dejé hace tiempo en meras cavilaciones.
Me aterra la idea de que haya trenes que sólo pasen una vez en la vida.
Y de un terror a otro voy dejando atrás paradas.
Quizá despierte algún día y descubra que jamás encontraré tus labios en el café de media tarde.
Y que no soy más que un ave de paso, buscando fundirse en la piel de un extraño.
Pero mientras vuelvo en mi................
Seguiré buscando el sabor de algo que me recuerde a ti.
Un cigarro o una buena copa de algo, da igual qué.
Lo único que busco es algo que se consuma, o tal vez que me consuma.
Como tu has hecho conmigo.
Necesito volver a sentirlo o a sentirte.
Revivir la sensación de que estarás ahí para siempre o al menos hasta que el amor se acabe.
Yo, que soy de creer en el destino, estoy aquí, aferrándome a él.
Suplicándole que una nuestros caminos de nuevo.
Me gustaría creer que todo ha sido un sueño y que nunca he sentido nada por nadie.
Sin embargo, lo he hecho, dejando la verdad absoluta para aquello de "nunca digas nunca".
Dichoso corazón, se suponía que no volverías a sentir.
Era lo acordado, yo intentaba sacarnos de esta y tu te abstenías de sentir.
Me la has jugado con un amor imposible y eso querido mío, duele demasiado.